Con el GNC lo que sucede, es que al estar en estado gaseosos, carece de “calor latente” que el fluido (en este caso la nafta) se lleva calor al cambiar de estado (líquido a gaseoso), esta ausencia hace que los asientos de válvulas se puedan resentir más rápidamente que con nafta, al trabajar con un poco más de temperatura (las válvulas no el motor).
Para contrarrestar este efecto marcas como Tomasetto Achille y BRC han creado estrategias de software en sus ECU (computadora de GNC) denominadas VSR (Valve Seat Recession) que su función principal es realizar pequeñas inyecciones de nafta en los momentos indicados. Estos es calibrado por el instalador.
Como siempre de nada sirve comprar el mejor equipo si tanto el instalador como el calibrador no hacen bien su trabajo.
Por eso siempre es muy importante elegir la electrónica adecuada con los componentes adecuados (Regulador, ECU, rampa de inyectores, válvula de carga y de cilindro) junto con un buen taller de instalación.